Madrid - Boston - New York

Día 1

30/7/09

La cosa empezó llegando a Madrid en el avión de las 22:30, que como siempre que Iberia está por medio llega con retraso. Después de una vuelta con mi amigo Javi, que el pobre hombre se tuvo que aguantar la espera, me encontré con mis futuros compañeros del próximo mes en una céntrica plaza madrileña.

Gracias a un amigo de Cristian que nos dejó dormir en su casa, a primera hora estábamos ya en marcha con una cantidad de bultos, desmesurada.....sólo lo que ocupan las tiendas y los sacos ya es algo impensable...menos mal que lo poco que llevamos de equipaje compensa con el resto porque sino, nos dejan la mitad en Barajas.

La primera sorpresa del viaje llegó cuando al ir a facturar y sacarnos las tarjetas de embarque, sorpresa !!!! el tipo de la agencia de viajes nos ha dejado un regalito final (después de su desastrosa gestión) y los billetes de Madrid - Boston - New York no están enlazados...menos mal que la buena mujer que estaba en el mostrador nos arregló el tema, porque sino hubiéramos tenido que llegar a Boston, recoger las maletas y volver a facturar para la ciudad de los rascacielos.

Como había overbooking, y el avión estaba completo, nos pasamos el viaje desperdigados y cada uno sentado en un sitio diferente. Nos dieron bien de comer y nos pusieron unas películas punteras: Hanna Montana y Tienes un e-mail (no necesitan comentarios), después de semejante viaje, y rellenar los papeles de emigración, llegamos a Boston. Y como no, en la primera ciudad americana, primera sorpresa, vamos pasando todos el control de pasaporte, con su consiguiente sello,preguntitas y las huellas dactilares, hasta que Javi nos dice que a él no le han puesto el sello....

Al parecer,entre su inglés y las pocas ganas de trabajar de la funcionaria que estaba en la ventanilla, le ha puesto una línea roja en el papel de aduana y lo han remitido a un cuarto con otros agentes....( las suposiciones y suspicacias no se hicieron esperar ). Nos repartimos en dos grupos: Jorge y Tamara se fueron a hacerle compañia a Javi y procurar que el guardia no hiciera intención de ponerse el guante de goma, y el resto esperábamos por las maletas en la cinta, porque como era de esperar, nos faltaba una !!!!.

Después de casi media hora de espera, la policia dejó el paz a Javi, le sellaron el pasaporte y nos pusimos a la cola para pasar el control de aduana, donde se tiene que reconocer la maleta y la policia te la abre para ver si se corresponde lo que va dentro con lo que se declara.Pero ante la magnitud de nuestras bolsas y que ibamos los 8 juntos, la señorita policia prefirió no arriesgarse y nos dejó pasar a todos de un golpe. Así que salimos a toda velocidad hacia la otra terminal para poder llegar a tiempo al enlace con el vuelo de Nueva York, que por cierto llegamos prácticamente por los pelos. ( Si no llega a ser por la señora de Iberia que nos hizo el enlace de los vuelos, no hubiéramos llegado ).

Primera foto del viaje, en Boston, esperando a un autobús que nos llevara a otra terminal. Estos somos los 8 que compatiremos viaje durante el próximo mes: Javi, Tamara, Cristian, Ana, Adrián, Angela, Fran y Jorge.

El avión del segundo vuelo era de coña. La capacidad máxima era de 39 personas...parecía más un jet privado que un avión comercial. Pero no por ello fue un mal vuelo ni mucho menos, es más, llegamos mucho antes de lo pensado. Aterrizamos en el aeropuerto, que se puede decir que los aeropuertos americanos son como los de las películas, todos enmoquetados, con sus mostradores grandes y la gente con las maletas.

Y ya en la cinta esperando por las maletas, aparecieron unas cuantas, pero el resto ( las más importantes como las tiendas, los sacos y alguna con ropa ) desaparecieron del mapa. Estuvimos esperando algo ásí como media hora o más, y al final Jorge se pasó por la oficina de la aerolínea para preguntar que es lo que había pasado. La respuesta fue curiosa : "El avión es pequeño y no entran todas las maletas" tócatelos.... Al final la solución fue un kit de emergencia con algo de pasta de dientes y un gel un tanto extraño, y la respuesta de que en cuanto llegaran las maletas nos las remitían al hotel....

Alquilamos una furgo-taxi de 9 plazas o más ( porque era enorme ) y con un conductor negro que medía 2x2 nos pegamos un paseo de más de 30 minutos desde el aeropuerto JFK hasta nuestro hostal ubicado cerca de Central Park. El trayecto fue de lo más interesante, el conductor a una velocidad bastante alegre, circulando por una autovia de 4 carriles de camino al centro de N.Y y con todas las luces de la ciudad brillando en la noche. El puente de Brooklyn, Skyline, etc.

Al final llegamos al hotel a las 21:30 ( hora americana ) que si le sumamos las 6 horas de diferencia, serían las 3:30 de España. Total : 17 horas de viaje desde el aeropuerto hasta el hotel. Nos alojamos en las habitaciones compartidas, nos duchamos y bajamos a cenar en La Gran Manzana de noche.

Foto de nuestra habitación compartida para los siguientes días en New York. En la foto, Cristian.

Ahora comprendo porque dicen que es "la ciudad que nunca duerme", a las 11 de la noche siguen pasando coches y taxis ( lo que más ) como si fuera hora punta en cualquier ciudad Española. Acabamos cenando una hamburguesa en un restaurante 24 horas. El propósito de comer sano en este país creo que no va a ser posible.....

Nuestra primera cena, la primera hamburguesa americana, cuántas llegaremos a comer durante todo el viaje ?? Seguramente decenas....

Compartimos habitación, Tamara, Cristian,Javi y yo ....y dos chicas más que no hemos visto aún....