Este viaje comenzó a gestarse el verano de 2008, en el desierto Kazajo y las montañas de Mongolia. Allí fue donde conocí a Jorge, ya lo conocía de antes, pero no habíamos tenído mucho tiempo para intercambiar ideas, proyectos, etc.
Durante ese par de noches que unos cuantos equipos españoles del Mongol Rally compartímos campamento, surgió la idea de atravesar EEUU en coche, recorriendo los parques nacionales, una parte de la famosa ruta 66, alguna ciudad importante y también las zonas rurales. Creo que era una idea que muchos de nosotros contemplábamos, y que tan sólo necesitábamos un pequeño empujón para realizarlo.
Una vez terminado el Mongol Rally y dejando un tiempo prudencial para descansar, aclimatarnos a la vida cotidiana otra vez y definir el proyecto, nos pusimos manos a la obra para llevarlo a cabo.
El viaje estaba abierto a todo aquel que quisiera participar y tuviera el tiempo necesario para ejecutarlo ( todo el mes de Agosto ), y de entre todos los candidatos que previamente se apuntaron, al final quedamos ocho, curiosamente fueron 7 riojanos y un gallego ( el que escribe ).
Durante los meses previos, se fueron concretando reuniones para ir definiendo el viaje: mapas, ciudades que visitar, repartirnos trabajo, alquiler de coches, etc, etc. Esas reuniones sirvieron también para que los 7 riojanos se fueran conociendo, porque aunque pueda parecer lo contrario en su mayoría no se conocían de nada entre ellos. A una de esas últimas reuniones, me incorporé yo, y con mi visita a Logroño, cerrábamos el círculo y ya estaban todas las presentaciones realizadas.
Con todo organizado, preparado y las cosas necesarias en sus mochilas / maletas, etc. Quedamos de encontrarnos el día antes de salir por la noche en Madrid, ellos llegarían en autobús desde Logroño, y yo en avión desde Vigo.
Por delante, todo un mes para conocer un país enorme y conocernos también entre nosotros...
martes, 29 de diciembre de 2009
Madrid - Boston - New York
Día 1
30/7/09
La cosa empezó llegando a Madrid en el avión de las 22:30, que como siempre que Iberia está por medio llega con retraso. Después de una vuelta con mi amigo Javi, que el pobre hombre se tuvo que aguantar la espera, me encontré con mis futuros compañeros del próximo mes en una céntrica plaza madrileña.
Gracias a un amigo de Cristian que nos dejó dormir en su casa, a primera hora estábamos ya en marcha con una cantidad de bultos, desmesurada.....sólo lo que ocupan las tiendas y los sacos ya es algo impensable...menos mal que lo poco que llevamos de equipaje compensa con el resto porque sino, nos dejan la mitad en Barajas.
La primera sorpresa del viaje llegó cuando al ir a facturar y sacarnos las tarjetas de embarque, sorpresa !!!! el tipo de la agencia de viajes nos ha dejado un regalito final (después de su desastrosa gestión) y los billetes de Madrid - Boston - New York no están enlazados...menos mal que la buena mujer que estaba en el mostrador nos arregló el tema, porque sino hubiéramos tenido que llegar a Boston, recoger las maletas y volver a facturar para la ciudad de los rascacielos.
Como había overbooking, y el avión estaba completo, nos pasamos el viaje desperdigados y cada uno sentado en un sitio diferente. Nos dieron bien de comer y nos pusieron unas películas punteras: Hanna Montana y Tienes un e-mail (no necesitan comentarios), después de semejante viaje, y rellenar los papeles de emigración, llegamos a Boston. Y como no, en la primera ciudad americana, primera sorpresa, vamos pasando todos el control de pasaporte, con su consiguiente sello,preguntitas y las huellas dactilares, hasta que Javi nos dice que a él no le han puesto el sello....
Al parecer,entre su inglés y las pocas ganas de trabajar de la funcionaria que estaba en la ventanilla, le ha puesto una línea roja en el papel de aduana y lo han remitido a un cuarto con otros agentes....( las suposiciones y suspicacias no se hicieron esperar ). Nos repartimos en dos grupos: Jorge y Tamara se fueron a hacerle compañia a Javi y procurar que el guardia no hiciera intención de ponerse el guante de goma, y el resto esperábamos por las maletas en la cinta, porque como era de esperar, nos faltaba una !!!!.
Después de casi media hora de espera, la policia dejó el paz a Javi, le sellaron el pasaporte y nos pusimos a la cola para pasar el control de aduana, donde se tiene que reconocer la maleta y la policia te la abre para ver si se corresponde lo que va dentro con lo que se declara.Pero ante la magnitud de nuestras bolsas y que ibamos los 8 juntos, la señorita policia prefirió no arriesgarse y nos dejó pasar a todos de un golpe. Así que salimos a toda velocidad hacia la otra terminal para poder llegar a tiempo al enlace con el vuelo de Nueva York, que por cierto llegamos prácticamente por los pelos. ( Si no llega a ser por la señora de Iberia que nos hizo el enlace de los vuelos, no hubiéramos llegado ).
El avión del segundo vuelo era de coña. La capacidad máxima era de 39 personas...parecía más un jet privado que un avión comercial. Pero no por ello fue un mal vuelo ni mucho menos, es más, llegamos mucho antes de lo pensado. Aterrizamos en el aeropuerto, que se puede decir que los aeropuertos americanos son como los de las películas, todos enmoquetados, con sus mostradores grandes y la gente con las maletas.
Y ya en la cinta esperando por las maletas, aparecieron unas cuantas, pero el resto ( las más importantes como las tiendas, los sacos y alguna con ropa ) desaparecieron del mapa. Estuvimos esperando algo ásí como media hora o más, y al final Jorge se pasó por la oficina de la aerolínea para preguntar que es lo que había pasado. La respuesta fue curiosa : "El avión es pequeño y no entran todas las maletas" tócatelos.... Al final la solución fue un kit de emergencia con algo de pasta de dientes y un gel un tanto extraño, y la respuesta de que en cuanto llegaran las maletas nos las remitían al hotel....
Alquilamos una furgo-taxi de 9 plazas o más ( porque era enorme ) y con un conductor negro que medía 2x2 nos pegamos un paseo de más de 30 minutos desde el aeropuerto JFK hasta nuestro hostal ubicado cerca de Central Park. El trayecto fue de lo más interesante, el conductor a una velocidad bastante alegre, circulando por una autovia de 4 carriles de camino al centro de N.Y y con todas las luces de la ciudad brillando en la noche. El puente de Brooklyn, Skyline, etc.
Al final llegamos al hotel a las 21:30 ( hora americana ) que si le sumamos las 6 horas de diferencia, serían las 3:30 de España. Total : 17 horas de viaje desde el aeropuerto hasta el hotel. Nos alojamos en las habitaciones compartidas, nos duchamos y bajamos a cenar en La Gran Manzana de noche.
Compartimos habitación, Tamara, Cristian,Javi y yo ....y dos chicas más que no hemos visto aún....
30/7/09
La cosa empezó llegando a Madrid en el avión de las 22:30, que como siempre que Iberia está por medio llega con retraso. Después de una vuelta con mi amigo Javi, que el pobre hombre se tuvo que aguantar la espera, me encontré con mis futuros compañeros del próximo mes en una céntrica plaza madrileña.
Gracias a un amigo de Cristian que nos dejó dormir en su casa, a primera hora estábamos ya en marcha con una cantidad de bultos, desmesurada.....sólo lo que ocupan las tiendas y los sacos ya es algo impensable...menos mal que lo poco que llevamos de equipaje compensa con el resto porque sino, nos dejan la mitad en Barajas.
La primera sorpresa del viaje llegó cuando al ir a facturar y sacarnos las tarjetas de embarque, sorpresa !!!! el tipo de la agencia de viajes nos ha dejado un regalito final (después de su desastrosa gestión) y los billetes de Madrid - Boston - New York no están enlazados...menos mal que la buena mujer que estaba en el mostrador nos arregló el tema, porque sino hubiéramos tenido que llegar a Boston, recoger las maletas y volver a facturar para la ciudad de los rascacielos.
Como había overbooking, y el avión estaba completo, nos pasamos el viaje desperdigados y cada uno sentado en un sitio diferente. Nos dieron bien de comer y nos pusieron unas películas punteras: Hanna Montana y Tienes un e-mail (no necesitan comentarios), después de semejante viaje, y rellenar los papeles de emigración, llegamos a Boston. Y como no, en la primera ciudad americana, primera sorpresa, vamos pasando todos el control de pasaporte, con su consiguiente sello,preguntitas y las huellas dactilares, hasta que Javi nos dice que a él no le han puesto el sello....
Al parecer,entre su inglés y las pocas ganas de trabajar de la funcionaria que estaba en la ventanilla, le ha puesto una línea roja en el papel de aduana y lo han remitido a un cuarto con otros agentes....( las suposiciones y suspicacias no se hicieron esperar ). Nos repartimos en dos grupos: Jorge y Tamara se fueron a hacerle compañia a Javi y procurar que el guardia no hiciera intención de ponerse el guante de goma, y el resto esperábamos por las maletas en la cinta, porque como era de esperar, nos faltaba una !!!!.
Después de casi media hora de espera, la policia dejó el paz a Javi, le sellaron el pasaporte y nos pusimos a la cola para pasar el control de aduana, donde se tiene que reconocer la maleta y la policia te la abre para ver si se corresponde lo que va dentro con lo que se declara.Pero ante la magnitud de nuestras bolsas y que ibamos los 8 juntos, la señorita policia prefirió no arriesgarse y nos dejó pasar a todos de un golpe. Así que salimos a toda velocidad hacia la otra terminal para poder llegar a tiempo al enlace con el vuelo de Nueva York, que por cierto llegamos prácticamente por los pelos. ( Si no llega a ser por la señora de Iberia que nos hizo el enlace de los vuelos, no hubiéramos llegado ).
Primera foto del viaje, en Boston, esperando a un autobús que nos llevara a otra terminal. Estos somos los 8 que compatiremos viaje durante el próximo mes: Javi, Tamara, Cristian, Ana, Adrián, Angela, Fran y Jorge.
El avión del segundo vuelo era de coña. La capacidad máxima era de 39 personas...parecía más un jet privado que un avión comercial. Pero no por ello fue un mal vuelo ni mucho menos, es más, llegamos mucho antes de lo pensado. Aterrizamos en el aeropuerto, que se puede decir que los aeropuertos americanos son como los de las películas, todos enmoquetados, con sus mostradores grandes y la gente con las maletas.
Y ya en la cinta esperando por las maletas, aparecieron unas cuantas, pero el resto ( las más importantes como las tiendas, los sacos y alguna con ropa ) desaparecieron del mapa. Estuvimos esperando algo ásí como media hora o más, y al final Jorge se pasó por la oficina de la aerolínea para preguntar que es lo que había pasado. La respuesta fue curiosa : "El avión es pequeño y no entran todas las maletas" tócatelos.... Al final la solución fue un kit de emergencia con algo de pasta de dientes y un gel un tanto extraño, y la respuesta de que en cuanto llegaran las maletas nos las remitían al hotel....
Alquilamos una furgo-taxi de 9 plazas o más ( porque era enorme ) y con un conductor negro que medía 2x2 nos pegamos un paseo de más de 30 minutos desde el aeropuerto JFK hasta nuestro hostal ubicado cerca de Central Park. El trayecto fue de lo más interesante, el conductor a una velocidad bastante alegre, circulando por una autovia de 4 carriles de camino al centro de N.Y y con todas las luces de la ciudad brillando en la noche. El puente de Brooklyn, Skyline, etc.
Al final llegamos al hotel a las 21:30 ( hora americana ) que si le sumamos las 6 horas de diferencia, serían las 3:30 de España. Total : 17 horas de viaje desde el aeropuerto hasta el hotel. Nos alojamos en las habitaciones compartidas, nos duchamos y bajamos a cenar en La Gran Manzana de noche.
Foto de nuestra habitación compartida para los siguientes días en New York. En la foto, Cristian.
Ahora comprendo porque dicen que es "la ciudad que nunca duerme", a las 11 de la noche siguen pasando coches y taxis ( lo que más ) como si fuera hora punta en cualquier ciudad Española. Acabamos cenando una hamburguesa en un restaurante 24 horas. El propósito de comer sano en este país creo que no va a ser posible.....
Nuestra primera cena, la primera hamburguesa americana, cuántas llegaremos a comer durante todo el viaje ?? Seguramente decenas....
Compartimos habitación, Tamara, Cristian,Javi y yo ....y dos chicas más que no hemos visto aún....
New York - New York
Día 2
31/7/09
Amanece lloviendo.Nuestras vecinas del género femenino,se han pasado media hora duchándose y vistiéndose (sin ningún tipo de pudor) en la habitación, ha sido curioso y a la vez sorprendente y como han dicho Javi y Cristian, una buena manera de empezar el viaje.
A pesar de la lluvía y la amenaza de mal tiempo, nos pusimos manos a la obra y en poco tiempo disfrutábamos de la experiencia del metro de esta ciudad. Una estación muy vieja, parece que haya sido la primera estación de metro de toda la ciudad.
Nuestra parada de destino fue la más a sur de todo Manhattan, justo para pasear unos cuantos metros y embarcanos en el ferry que nos acerca a Staten Isand y desde el que se puede ver la Estatua de la Libertad de forma gratuita. La estatua en sí, no parece tan grande como se puede ver en la televisión o en fotos. Después del paseo en barco, al llegar al puerto, tan pronto como hemos salido, nos hemos vuelto a girar y otra vez de regreso a Manhattan.
A la vuelta del viaje marítimo, nos hemos dado un paseo por Battery Park, donde estaba el antiguo castillo desde el cual registraban a todos los inmigrantes que llegaban a EEUU a principios del s.XX y donde ahora hay un pequeño museo. En los jardines de este parque, se encuentra una monumento en forma de bola, que se ha salvado del atentado de las torres gemelas.
El centro de Wall Street, está coronado por gigante bandera de los EEUU en el edifcio de la Bolsa y la figura de George Washington enfrente. Alrededor algún rascacielos a destacar como la torre TrumpBuilding o el famoso Toro.
Pero el tiempo nos jugó una mala pasada, y después de una tregua de varias horas y justo cuando llevábamos medio puente cruzado, se cerró a llover como si no lo hubiera hecho en años. Por un lado mejor, porque no todos los días se pueden sacar fotos al puente completamente vacío, pero por el otros nos tuvimos que fastidiar y volvernos al hotel sin ver la puesta de Sol y el encendido de las luces de la ciudad.
Al llegar al hotel la noticia del día: Las maletas han aparecido, menos mal, porque para los que no tenían ropa para cambiarse era un problema llegar calado hasta los huesos al hostal.
Mañana toca día de rascacielos y Central Park. A ver si el tiempo acompaña.....
31/7/09
Amanece lloviendo.Nuestras vecinas del género femenino,se han pasado media hora duchándose y vistiéndose (sin ningún tipo de pudor) en la habitación, ha sido curioso y a la vez sorprendente y como han dicho Javi y Cristian, una buena manera de empezar el viaje.
A pesar de la lluvía y la amenaza de mal tiempo, nos pusimos manos a la obra y en poco tiempo disfrutábamos de la experiencia del metro de esta ciudad. Una estación muy vieja, parece que haya sido la primera estación de metro de toda la ciudad.
Primera imagen de New York: niebla, lluvía y un taxi....
La sensación en esta ciudad es agobiante. La humedad ronda el 90% ( sino más ) y cada 4 pasos uno está sudando la gota gorda. Pero dentro del metro, esa sensación es multiplicada por diez. Además, la entrada a los vagones es una carrera de empujones, obstáculos y una marea de gente que parece que te va a esmagar en medio segundo.
Nuestra parada de destino fue la más a sur de todo Manhattan, justo para pasear unos cuantos metros y embarcanos en el ferry que nos acerca a Staten Isand y desde el que se puede ver la Estatua de la Libertad de forma gratuita. La estatua en sí, no parece tan grande como se puede ver en la televisión o en fotos. Después del paseo en barco, al llegar al puerto, tan pronto como hemos salido, nos hemos vuelto a girar y otra vez de regreso a Manhattan.
Ese ferry es público y gratuito y es utilizado para hacer esta pequeña excursión y contemplar la estatua desde el agua en vez de pagar otro que lleva directamete a la isla donde se encuentra.
Vista panorámica del skyline de Manhattan desde el agua.
Vista panorámica del skyline de Manhattan desde el agua.
A la vuelta del viaje marítimo, nos hemos dado un paseo por Battery Park, donde estaba el antiguo castillo desde el cual registraban a todos los inmigrantes que llegaban a EEUU a principios del s.XX y donde ahora hay un pequeño museo. En los jardines de este parque, se encuentra una monumento en forma de bola, que se ha salvado del atentado de las torres gemelas.
A la bola, se le pueden ver con claridad los agujeros de los impactos y los trozos de metal hundidos.
Nuestra siguiente parada en la ruta ha sido World Trade Center ( la zona cero ), que la visita es más bien por pasar y ver eso que otra cosa, porque exceptuando el edificio del Financial Center, el resto es un cúmulo de obras, grúas y ruido. Algún día será una zona interesante de visitar, pero ahora tan sólo hay obras. Es mucho más impresionante ver la isla desde el agua y pensar lo que tuvo ser observar como los aviones se estrellaban contra esas moles de hormigón, que estar en el punto Cero en sí.
Una gran superficie llena de hormigón y de grúas es lo que queda de la zona cero, por el momento tan sólo están con los aparcamientos subterráneos.
Siguiendo con nuestra ruta, nos topamos con la iglesia de Trinity Church, con su cementerio en el jardin ( algunas tumbas son de 1750 ) y justo enfrente del centro de la economía mundial: Wall Street. Una marea de policia todos armados hasta las trancas, y con esos coches negros y blancos o las mega furgonetas V8 custodian la zona continuamente.
El centro de Wall Street, está coronado por gigante bandera de los EEUU en el edifcio de la Bolsa y la figura de George Washington enfrente. Alrededor algún rascacielos a destacar como la torre TrumpBuilding o el famoso Toro.
No fue nada fácil conseguir sacarse una foto de grupo con el famososo toro sin tener gente por el medio, hay decenas de personas por minuto rodeándolo.
Edificio de la bolsa en pleno Wall Steet, las enormes banderas con barras y estrellas se pueden ver en cualquier edificio oficial, tienda, hotel, etc.
Después de semejante caminata, bajamos al puerto a comer para reponer fuerzas y afrontar por la tarde el puente de Brooklyn.
Pero el tiempo nos jugó una mala pasada, y después de una tregua de varias horas y justo cuando llevábamos medio puente cruzado, se cerró a llover como si no lo hubiera hecho en años. Por un lado mejor, porque no todos los días se pueden sacar fotos al puente completamente vacío, pero por el otros nos tuvimos que fastidiar y volvernos al hotel sin ver la puesta de Sol y el encendido de las luces de la ciudad.
La lluvia también tuvo su lado bueno, gracias a ella pudimos pasear y sacar fotos en el puente de Brooklyn nosotros sólos. Otro momento de suerte. De izqda a derecha: Fran, Cristian, Javi, Jorge y Adrián.
Y una vista de Manhattan desde el puente de Brooklyn
Llegamos al hotel completamente empapados, pues desde el final del puente hasta la parada de metro más próxima hay un buen cacho, que por supuesto hicimos corriendo a todo trapo. Hay que decir tambié que desde que estamos aquí TODO el mundo ha sido super amable con nosotros y nos han indicado y ayudado en todo momento.
Al llegar al hotel la noticia del día: Las maletas han aparecido, menos mal, porque para los que no tenían ropa para cambiarse era un problema llegar calado hasta los huesos al hostal.
Mañana toca día de rascacielos y Central Park. A ver si el tiempo acompaña.....
lunes, 28 de diciembre de 2009
New York - New York
Día 3
1/8/09
Que mejor manera de empezar un sàbado en N.Y que con una llamada de teléfono a las 7:30 am. Después de ese gran despertar, una ducha, desayuno, la preparación de la comida del día; unos bocadillos en pan de molde con mortadela y queso.Salimos a Columbus Circle para empezar el día que se presenta de todo menos aburrido.
Aprovechando que soy el primero en bajar al comedor, hago una llamada a casa desde la calle, y en el transcurso de la misma me paran 3 taxis que me ofrecen sus servicios y un coche de policia preguntandome si necesito algo. La gente se aburre mucho un sábado a las 8:00 am en N.Y.
Cuando llegamos al metro, vaya lío !!!! Resulta que una ciudad como esta tiene el metro peor diseñado y cuidado de todos cuantos he visto hasta ahora.Está sucio, todo en una situación de obras paradas ya hace tiempo y los carteles son de todo menos explicativos y claros. Nos pasamos un buen rato intentando entender que bajada teníamos que tomar y preguntando a la gente, que en muchos casos tenía menos idea que nosotros.El caos es tal, que para llegar al anden al que íbamos, hay que bajar hasta el fondo de todo de la estación, atravesar otro anden hasta el final y subir unas escaleras, en fin..............
Una foto de grupo el lo alto de la terraza que han montado en Times Square. Justo debajo está el nuevo centro de venta de entradas para los musicales.
Los carteles anunciando musicales de Brodway inundan las fachadas ( Shrek, Mary Poppins, El rey León, etc ). Mientras continuamos por la calle que da a Central Park, cientos de puestos de ropa y recuerdos se agolpan en la calle a modo de mercadillo.A su lado otros tantos puestos de comida a la brasa, zumos, etc nos ofrecen una imagen completamente opuesta a la que dejamos atrás sólo 1 calle más abajo.
Saliendo del Empire State, nos fuimos parando en cuanta tienda de recuerdos nos íbamos encontrando, más bien por curiosidad que por otra cosa. Al final del dia las compras fueron unas postales,un imán y unas camisetas que se han comprado Jorge,Javi y Cristián.
Nuestro siguiente punto de parada ha sido la Biblioteca Pública. Me sorprendió mucho que nos dejaran entrar como si estuvieramos en nuestra casa, sacando fotos y paseando a nuestras anchas por un lugar donde se supone que es de silencio y tranquilidad. Es un lugar increíble, hecho practicamente entero de mármol blanco y con todo el interior de madera tallada y unas pinturas terminando todos los techos. La cosa en la biblioteca iba bien hasta que Cristian quiso subir a una zona más alta por unas escaleras interiores y un guarda le gritó : Where do you go ??? Nos marchamos para evitar males mayores jeje.
Siguiendo por la calle 42 y cruzando Madison Avenue, llegamos a la estación Central de Tren, un edificio embutido en medio de la gran ciudad.Dentro de la estación hay una de las tantas banderas de 5x5 enormes que este país tiene en sus centros oficiales. A esa hora las piernas empezaban a pedir auxilios ya, y eso que aún no habíamos recorrido ni la mitad de lo proyectado. Porque justo pegado a la Terminal Central está otro edificio mítico: El edificio Chrysler. En este caso la posibilidad de entrar y " cotillear" por dentro se resume a la puerta y 2 metros de pasillo desde donde te vigila un guardia al fondo de la sala,pero eso no impedía a Tamara darle un grito para preguntarle cuantas plantas tiene.
Y para cerrar la "trilogia" de grandes rascacielos, nos dimos otro medio maratón hasta Rockefeller Center, donde compramos las entradas del mirador, y así por la tarde no hacer cola ni tener problemas a la hora de comprarlas. Como el calor apretaba y el hambre también nos pasamos por un McDonalds ( por variar un poco de comida jaja ). Dentro nos volvió a pasar lo mismo que cuando compré la tarjeta de memoria de la cámara, intento hablar en inglés explicándome para que al final de todo el tipo me conteste en castellano y me diga : Gracias, hasta luego......Si saben español y ven que somos españoles también porque no lo dicen ??? En fin....
Antes del paseo en bicicleta programado por Central Park, nos pasamos por la Catedral de San Patricio. Es algo increíble la cantidad de vidrieras que tiene. Todo eso acompañado de la forma en que está construída, sobre todo en un lugar como EEUU donde no es muy común ver cosas como esta. Antes de entrar en la catedral, nos encontramos con una típica boda americana: Los novios montados en un taxi antiguo, con el cartel de Just Married detrás y las latas colgadas del parachoques haciendo ruído mientras se mezclaban en medio de la ciudad que cada día nos sorprende mucho más....
Y como si fuéramos auténticos guiris, pasamos por lo que seguramente sea una de las zonas más caras de tiendas de todo el mundo. Todas las marcas de ropa y complementos caros están allí presentes, con unas tiendas de impresión.En una de ellas, un negro cachitas estaba en la puerta sacándose fotos con chicas, pero a nosotros nos dió igual y nos pusimos también, el resultado es para ver mejor que contar....
El paseo por Central Park en bicicleta empezó cuando un Bielorruso nos ofreció alquiler a 15 $ por hora cada bicicleta. Como buenos españoles sin recursos que somos, acabamos alquilándolas al precio de 11$ las dos horas jajaja.
Central Park es un lugar donde uno puede encontrarse de todo: desde niños paseando con sus padres, policias con mini-coches de 3 ruedas, mucha gente paseando en bicicleta o justo en el centro del parque unos cuantos campos de Baseball donde la gente pasa la tarde de sábado. Al final a lo tonto a lo tonto nos dimos la vuelta completa al circuito que hay para bicicletas, patines, etc. Por ese camino nos cruzamos con un hombre que bailaba a la vez que patinaba y escuchaba música ( Jorge tiene el documento gráfico ) o un grupo de patinadores en una especie de clase musical, acompañados de un DJ que ponía música mientras estos bailaban a estilo libre....Lo que allí nos encontramos fue un espectáculo digno de ver, una mujer que parecía en trance, un hombre negro sin camiseta que se gustaba a si mismo, o un chino con un sombrero dando unos pasos de baile ......
Aprovechamos el viaje de vuelta para volver a pasar por Times Square pero esta vez de noche. A las 21:30 había más gente aún que al mediodía, parecía cualquier sitio de veraneo en pleno Agosto, imposible andar, moverse, etc.
Hemos tenido el día completo : Hemos realizado una visita amplia a la ciudad, nos hemos cruzado cientos de limusinas de todos los modelos y colores posibles, y ya callejeamos por N.Y como si fuera Logroño o Vigo.
Para mañana nos queda la otra parte Manhattan: Chinatown,Little Italy y el Soho. Esperemos que no nos llueva mucho, porque la ropa aún no está seca después de la mojadura de ayer.
1/8/09
Que mejor manera de empezar un sàbado en N.Y que con una llamada de teléfono a las 7:30 am. Después de ese gran despertar, una ducha, desayuno, la preparación de la comida del día; unos bocadillos en pan de molde con mortadela y queso.Salimos a Columbus Circle para empezar el día que se presenta de todo menos aburrido.
Aprovechando que soy el primero en bajar al comedor, hago una llamada a casa desde la calle, y en el transcurso de la misma me paran 3 taxis que me ofrecen sus servicios y un coche de policia preguntandome si necesito algo. La gente se aburre mucho un sábado a las 8:00 am en N.Y.
Cuando llegamos al metro, vaya lío !!!! Resulta que una ciudad como esta tiene el metro peor diseñado y cuidado de todos cuantos he visto hasta ahora.Está sucio, todo en una situación de obras paradas ya hace tiempo y los carteles son de todo menos explicativos y claros. Nos pasamos un buen rato intentando entender que bajada teníamos que tomar y preguntando a la gente, que en muchos casos tenía menos idea que nosotros.El caos es tal, que para llegar al anden al que íbamos, hay que bajar hasta el fondo de todo de la estación, atravesar otro anden hasta el final y subir unas escaleras, en fin..............
Jorge y Angela posando para la foto en el metro que nos llevó desde Columbus Circle a Times Square.
Después de 2 paradas llegamos a Tiimes Square. Igual que el día de ayer, la diferencia entre lo que se ve por TV y lo que aquí hay es bastante grande.Encontrarse frente a frente con una calle llena de edificios enormes y todos llenos de carteles luminosos con una resolución de imagen bestial, que pocas palabras hay para describirlo. Cientos de taxis atraviesan la calle por minuto, los turistas no dejan de sacarse fotos, pasean entre las tiendas o los vendedores de tours de autobús ofreciendo viajes por la ciudad.
Carteles luminosos y coches de policia son los habitantes habituales de Times Square. Es imposible encontrarse un edificio sin un cartel, o un cruce de dos calles sin un coche o furgón de la NYPD.
Una foto de grupo el lo alto de la terraza que han montado en Times Square. Justo debajo está el nuevo centro de venta de entradas para los musicales.
Los carteles anunciando musicales de Brodway inundan las fachadas ( Shrek, Mary Poppins, El rey León, etc ). Mientras continuamos por la calle que da a Central Park, cientos de puestos de ropa y recuerdos se agolpan en la calle a modo de mercadillo.A su lado otros tantos puestos de comida a la brasa, zumos, etc nos ofrecen una imagen completamente opuesta a la que dejamos atrás sólo 1 calle más abajo.
Decenas de carteles anunciando los musicales (que no son baratos, por cierto) comparten espacio con otros de grandes multinacionales de deporte, cosméticos, automóviles, etc.
Las colas que se hacen para comprar una entrada de un musical llegan a ser de varios cientos de personas, da igual que llueva o haga sol. Y los horarios son bastante extraños para nosotros: 14:30, 15:00, 19:30.......
Nuestro segundo punto de parada fue visitar aunque sólo fuera por fuera el Empire State, famoso entre otras cosas porque era el edificio donde King Kong las preparaba bien gordas en la película jeje. No teníamos intención desde un principio de subir a él. El Empire State aparece en la 5 avenida como un más entre los rascacielos que con el cohabitan, pero después de pasear por una de las calles más famosa de toda la ciudad ( sino la que más ) su sombra se prolonga desde la distancia. Entramos en su parte baja ( todos los bajos de estos edificios son de entrada gratuita ).
Las colas que se hacen para comprar una entrada de un musical llegan a ser de varios cientos de personas, da igual que llueva o haga sol. Y los horarios son bastante extraños para nosotros: 14:30, 15:00, 19:30.......
Saliendo del Empire State, nos fuimos parando en cuanta tienda de recuerdos nos íbamos encontrando, más bien por curiosidad que por otra cosa. Al final del dia las compras fueron unas postales,un imán y unas camisetas que se han comprado Jorge,Javi y Cristián.
Nuestro siguiente punto de parada ha sido la Biblioteca Pública. Me sorprendió mucho que nos dejaran entrar como si estuvieramos en nuestra casa, sacando fotos y paseando a nuestras anchas por un lugar donde se supone que es de silencio y tranquilidad. Es un lugar increíble, hecho practicamente entero de mármol blanco y con todo el interior de madera tallada y unas pinturas terminando todos los techos. La cosa en la biblioteca iba bien hasta que Cristian quiso subir a una zona más alta por unas escaleras interiores y un guarda le gritó : Where do you go ??? Nos marchamos para evitar males mayores jeje.
Imagen del interior de una de las salas de la Biblioteca pública. Fran posa como si estuviera leyendo un libro.
Siguiendo por la calle 42 y cruzando Madison Avenue, llegamos a la estación Central de Tren, un edificio embutido en medio de la gran ciudad.Dentro de la estación hay una de las tantas banderas de 5x5 enormes que este país tiene en sus centros oficiales. A esa hora las piernas empezaban a pedir auxilios ya, y eso que aún no habíamos recorrido ni la mitad de lo proyectado. Porque justo pegado a la Terminal Central está otro edificio mítico: El edificio Chrysler. En este caso la posibilidad de entrar y " cotillear" por dentro se resume a la puerta y 2 metros de pasillo desde donde te vigila un guardia al fondo de la sala,pero eso no impedía a Tamara darle un grito para preguntarle cuantas plantas tiene.
Y para cerrar la "trilogia" de grandes rascacielos, nos dimos otro medio maratón hasta Rockefeller Center, donde compramos las entradas del mirador, y así por la tarde no hacer cola ni tener problemas a la hora de comprarlas. Como el calor apretaba y el hambre también nos pasamos por un McDonalds ( por variar un poco de comida jaja ). Dentro nos volvió a pasar lo mismo que cuando compré la tarjeta de memoria de la cámara, intento hablar en inglés explicándome para que al final de todo el tipo me conteste en castellano y me diga : Gracias, hasta luego......Si saben español y ven que somos españoles también porque no lo dicen ??? En fin....
Antes del paseo en bicicleta programado por Central Park, nos pasamos por la Catedral de San Patricio. Es algo increíble la cantidad de vidrieras que tiene. Todo eso acompañado de la forma en que está construída, sobre todo en un lugar como EEUU donde no es muy común ver cosas como esta. Antes de entrar en la catedral, nos encontramos con una típica boda americana: Los novios montados en un taxi antiguo, con el cartel de Just Married detrás y las latas colgadas del parachoques haciendo ruído mientras se mezclaban en medio de la ciudad que cada día nos sorprende mucho más....
El taxi en el que los novios se marchaban lo tenía todo: Un conductor de smoking, las latas colgado, un cartelón de recién casados, etc.. Hasta la matrícula del coche era original, Hey Taxi !!
Y como si fuéramos auténticos guiris, pasamos por lo que seguramente sea una de las zonas más caras de tiendas de todo el mundo. Todas las marcas de ropa y complementos caros están allí presentes, con unas tiendas de impresión.En una de ellas, un negro cachitas estaba en la puerta sacándose fotos con chicas, pero a nosotros nos dió igual y nos pusimos también, el resultado es para ver mejor que contar....
Cada uno poniendo su mejor cara para salir con el cachitas...a alguno como a mí, se me ve hasta la tira del bodybelt donde llevo el pasarporte y el dinero...
El paseo por Central Park en bicicleta empezó cuando un Bielorruso nos ofreció alquiler a 15 $ por hora cada bicicleta. Como buenos españoles sin recursos que somos, acabamos alquilándolas al precio de 11$ las dos horas jajaja.
Central Park es un lugar donde uno puede encontrarse de todo: desde niños paseando con sus padres, policias con mini-coches de 3 ruedas, mucha gente paseando en bicicleta o justo en el centro del parque unos cuantos campos de Baseball donde la gente pasa la tarde de sábado. Al final a lo tonto a lo tonto nos dimos la vuelta completa al circuito que hay para bicicletas, patines, etc. Por ese camino nos cruzamos con un hombre que bailaba a la vez que patinaba y escuchaba música ( Jorge tiene el documento gráfico ) o un grupo de patinadores en una especie de clase musical, acompañados de un DJ que ponía música mientras estos bailaban a estilo libre....Lo que allí nos encontramos fue un espectáculo digno de ver, una mujer que parecía en trance, un hombre negro sin camiseta que se gustaba a si mismo, o un chino con un sombrero dando unos pasos de baile ......
Central Park, el pulmón de Manhattan, donde la gente se relaja tomando el Sol y paseando o montando en bici.
Les devolvimos las biciletas a los piratas bielorrusos que tenían la furgoneta escondida en una calle y pusimos rumbo al Rockefeller Center para ver la puesta de Sol de Manhattan...Las vistas desde lo alto del edificio son espectaculares, todo Manhattan se puede ver desde ahí arriba, aparte del viaje en ascensor con proyección en el techo de éste incluída hasta la planta 64.
Aprovechamos el viaje de vuelta para volver a pasar por Times Square pero esta vez de noche. A las 21:30 había más gente aún que al mediodía, parecía cualquier sitio de veraneo en pleno Agosto, imposible andar, moverse, etc.
Vista de la gran extensión que ocupa Central Park y Manhattan desde lo alto del Rockefeller Center.
Empire State y resto de grandes edificios que lo rodean. Desde esta altura da la impresión de estar contemplando una maqueta.
De vuelta al hostal y con los pies y las piernas reventadas, aún nos quedaba la última cosa interesante por ver. En Columbus Center y dándo vueltas a la plaza, estaban grabando una escena de una película, donde un 4x4 llevaba un remolque con un Mercedes encima, y alrededor todas la cámaras, luces, etc.
Empire State y resto de grandes edificios que lo rodean. Desde esta altura da la impresión de estar contemplando una maqueta.
Hemos tenido el día completo : Hemos realizado una visita amplia a la ciudad, nos hemos cruzado cientos de limusinas de todos los modelos y colores posibles, y ya callejeamos por N.Y como si fuera Logroño o Vigo.
Para mañana nos queda la otra parte Manhattan: Chinatown,Little Italy y el Soho. Esperemos que no nos llueva mucho, porque la ropa aún no está seca después de la mojadura de ayer.
domingo, 27 de diciembre de 2009
New York - New York
Día 4
2/08/09
El día amaneció gris, muy gris.....ya pintaba mal desde el despertar. Tamara se fue a correr a Central Park con Fran y nos dejó a modo de regalito el despertador puesto y sonando cada 9 minutos, para matarla....menos mal que Cristian se levantó para apagarlo, porque yo no tenia ni ganas de bajar de la litera para buscarlo.
El plan que llevabámos era presenciar una misa Gospel en el barrio de Harlem, como buenos católicos un domingo por la mañana. Así que a pesar de la lluvia que caía, desafiámos a las inclemencias y hacia la estación de metro nos fuimos, donde para variar volvímos a tener problemas para encontrar el andén adecuado. El metro de esta ciudad es como ya he dicho en otras ocasiones pésimo.
La lluvia cada vez era peor y no había nada que nos cubriera para protegernos.Algunos iban con chuvasqueros, otros con un poncho de plástico y algunos sin nada. Todo para que cuando llegamos a la iglesia, había como 50 personas en una fila a la intemperie esperando a poder entrar. Al parecer había que esperar a que llegara la hora de empezar el sermón y si quedaban plazas irían mandando entrar a la gente.Al final y después de esperar un rato calados hasta los huesos, decidimos dejar nuestra fe católica para otra ocasión y volver al metro.
Tiramos en dirección a Chinatown, rogando para que el tiempo nos diera una tregua y al salir del metro...sorpresa !!!! ya no llovía. Esta zona con tanto nombre, me decepcionó bastante, me esperaba más de lo que es. Es decir, no deja de ser una gran zona donde hay cientos de tiendas de chinos como las que puede haber en España,la única diferencia es que en vez de vender paraguas y cacharros de cocina, tienen camisetas de I Love N.Y e imitaciones de relojes que venden a 40$.
Entrada e interior de una tienda de regalos, souvenirs, etc. Quizás no se aprecie muy bien, pero justo a la izquierda de la puerta, está el dueño sentado esperando a que los clientes pasen y "muerdan el anzuelo.."
El siguiente barrio que visitamos fue Little Italy, que ahroa si que se le puede llamar Little, más que nada porque los Chinos les están acorralando espacio a pasos de gigante. Aún así, está lleno de restaurantes, banderas y farolas todas pintadas con los colores de la madre patria de Il Cavaliere Berlusconi ( jeje). Pero como todo no iba a ser bueno del todo, empezó a llover otra vez....y de que manera !!!.
Nos refugiamos en un Subway a comer y esperar a que escampara un poco, pero como no paraba salimos a mojarnos de arriba a abajo. Llegamos andando hasta la zona del Soho, pero era tal la lluvia que caía que nos volvimos al hostal a comer y ver como cambiábamos el plan.
Hicimos de comer en la cocina del hostal, y mientras tanto el tiempo cambió ( cosa común en esta ciudad ) y salió el Sol. Así que volvimos a hacer el camino entre nuestro centro de operaciones y Times Square. Paramos en el punto de venta de entradas para los musicales de Broadway, y todos menos Javi y yo se fueron a un musical que iba de un tipo de New Jersey que pretendía salvar el mundo o no se que....Mientras tanto nosotros dos nos fuímos a dar otro paseo más por el centro de Manhattanl sin un punto fijo ni rumbo concreto.Durante ese paseo entramos en un Toy´s´Rus que tiene una noria dentro !!! o una tieda de música con miles de vinilos, cd´s y objetos de colección de Elvis, Beatles, M.Jackson, etc.
Cuando salieron los musicaleros, nos montamos en el metro y nos fuimos a Brooklyn para ver las vistas nocturnas de la Gran Manzana desde la otra parte. La imagen es muy buena y las fotos que salen desde allí también.
2/08/09
El día amaneció gris, muy gris.....ya pintaba mal desde el despertar. Tamara se fue a correr a Central Park con Fran y nos dejó a modo de regalito el despertador puesto y sonando cada 9 minutos, para matarla....menos mal que Cristian se levantó para apagarlo, porque yo no tenia ni ganas de bajar de la litera para buscarlo.
El plan que llevabámos era presenciar una misa Gospel en el barrio de Harlem, como buenos católicos un domingo por la mañana. Así que a pesar de la lluvia que caía, desafiámos a las inclemencias y hacia la estación de metro nos fuimos, donde para variar volvímos a tener problemas para encontrar el andén adecuado. El metro de esta ciudad es como ya he dicho en otras ocasiones pésimo.
La lluvia cada vez era peor y no había nada que nos cubriera para protegernos.Algunos iban con chuvasqueros, otros con un poncho de plástico y algunos sin nada. Todo para que cuando llegamos a la iglesia, había como 50 personas en una fila a la intemperie esperando a poder entrar. Al parecer había que esperar a que llegara la hora de empezar el sermón y si quedaban plazas irían mandando entrar a la gente.Al final y después de esperar un rato calados hasta los huesos, decidimos dejar nuestra fe católica para otra ocasión y volver al metro.
Tiramos en dirección a Chinatown, rogando para que el tiempo nos diera una tregua y al salir del metro...sorpresa !!!! ya no llovía. Esta zona con tanto nombre, me decepcionó bastante, me esperaba más de lo que es. Es decir, no deja de ser una gran zona donde hay cientos de tiendas de chinos como las que puede haber en España,la única diferencia es que en vez de vender paraguas y cacharros de cocina, tienen camisetas de I Love N.Y e imitaciones de relojes que venden a 40$.
Chinatown está absorbiendo poco a poco al resto de barrios que lo rodean, se nota la presencia de gente oriental en otras zonas cercanas, alguna tienda, etc, etc.
Entrada e interior de una tienda de regalos, souvenirs, etc. Quizás no se aprecie muy bien, pero justo a la izquierda de la puerta, está el dueño sentado esperando a que los clientes pasen y "muerdan el anzuelo.."
El siguiente barrio que visitamos fue Little Italy, que ahroa si que se le puede llamar Little, más que nada porque los Chinos les están acorralando espacio a pasos de gigante. Aún así, está lleno de restaurantes, banderas y farolas todas pintadas con los colores de la madre patria de Il Cavaliere Berlusconi ( jeje). Pero como todo no iba a ser bueno del todo, empezó a llover otra vez....y de que manera !!!.
Fachada del edificio más famoso de todo Little Italy. Una zona en claro contraste con Chinatown: Otra forma de vida, sólo restaurantes...y caros !!!, nada de tiendas, menos gente por la calle...
Nos refugiamos en un Subway a comer y esperar a que escampara un poco, pero como no paraba salimos a mojarnos de arriba a abajo. Llegamos andando hasta la zona del Soho, pero era tal la lluvia que caía que nos volvimos al hostal a comer y ver como cambiábamos el plan.
Hicimos de comer en la cocina del hostal, y mientras tanto el tiempo cambió ( cosa común en esta ciudad ) y salió el Sol. Así que volvimos a hacer el camino entre nuestro centro de operaciones y Times Square. Paramos en el punto de venta de entradas para los musicales de Broadway, y todos menos Javi y yo se fueron a un musical que iba de un tipo de New Jersey que pretendía salvar el mundo o no se que....Mientras tanto nosotros dos nos fuímos a dar otro paseo más por el centro de Manhattanl sin un punto fijo ni rumbo concreto.Durante ese paseo entramos en un Toy´s´Rus que tiene una noria dentro !!! o una tieda de música con miles de vinilos, cd´s y objetos de colección de Elvis, Beatles, M.Jackson, etc.
Un paseo nocturno por Times Square, no es un paseo si no se saca alguna foto a los carteles luminosos. Aunque ya se hayan sacado el día anterior también.
Cuando salieron los musicaleros, nos montamos en el metro y nos fuimos a Brooklyn para ver las vistas nocturnas de la Gran Manzana desde la otra parte. La imagen es muy buena y las fotos que salen desde allí también.
En Brooklyn y a los pies del puente, hay un pequeño paseo - mirador de madera desde donde se puede tener esta vista nocturna de Manhattan...
Otra foto más, en este caso el puente y otra zona de la isla.
El día no daba para más :Una mojadura, una comida en el hostal, la última visita a Times Square de noche......
Otra foto más, en este caso el puente y otra zona de la isla.
El día no daba para más :Una mojadura, una comida en el hostal, la última visita a Times Square de noche......
New York - Philadelphia - Washington
Día 5
3/08/09
A las 7:00 otra vez el despertador de Tamara, pero esta vez con una canción más entretenida y menos estridente: Mary Poppins.
Después de desayunar el resto del yogurt de Kg que me habia comprado el dia anterior, nos fuímos Jorge,Fran,Cristian y yo a por los coches de alquiler que habíamos reservado desde España. Para variar y como era de esperar el último día en N.Y fue el día en que no nos perdimos en el metro y llegamos a la oficina de alquiler a la primerísima.
Nos esperábamos cualquier cosa y después de un rato esperando, cubriendo papeles, etc. La chica que nos atendía nos dice: Un Hyundai Accent......Un hyundai Accent ??? Que coche nos das ??? Le preguntamos y dijimos que teníamos pagados dos coches tipo berlina y que nos tenían que dar algo similar o de superior categoría. Su respuesta fue: Os ofrezco un coche más grande por 275$ más, ( no te fastidia, así hago yo negocio también ).
Bajamos al aparcamiento a ver que coche nos daban finalmente, si nos daban el Julay Accent y teníamos que gritarles o que. Apareció el tipo de la oficina de alquiler con un Chrysler bastante grande ( tipo PT Cruiser ) y el Julay Accent, pero con maletero.Menos mal que no nos dieron dos Hyunday porque no hubieran entrado todas las cosas que llevamos. Nos montamos, organizamos todo y pusimos rumbo a Philadelphia, con jorge y Fran como pilotos.
Después de unas 100 millas llegamos y aparcamos en un subterráneo que hay cerca de la zona antigua. El camino hasta ahí es la típica autopista americana de 3 o 4 carriles por sentido, aburrida al ir con un coche automático y con los enormes camiones adelantándote por la izquierda a todo trapo.
Y esta es una de las campanas más famosas del mundo. En las fotos que se muestran con su historia se pueden ver a todo tipo de personajes del mundo, desde política, reyes, intelectuales, e incluso el Dalai Lama posando con ella.
Aparte de esto, un edificio anexo y el barrio de casas antguas que hay alrededor, la zona no tiene mucho más interés. Da la impresión de estar en un pueblo un poco grande, porque el tráfco no es muy excesivo, hay poco ruido y da la impresión de ser un lugar super tranquilo.
Salimos y tomamos direccion a Wasington, con alguna pequeña retención en el camino.A una velocidad de crucero de 55/60 millas, los coches te pasan a mucha más velocidad pero nosotros no nos la queremos jugar con una multa o con un policia aburrido. Al final llegamos a la capital del país sin nigún problema y dejamos las cosas en el hostal, que estaba muy bien.
Bajamos a cenar en un supermercado que tiene cominda preparada y unos asientos enfrente de las cajas para comer (estos americanos....) y luego nos dimos un paseo nocturno hasta la Casa Blanca, y el Obelisco, etc.
La casa Blanca está como incrustada en un parque en medio de la ciudad y no se ve hasta que no se está casi delante.Por la parte trasera la policia tiene acordonada una zona con vayas y bloques de hormigón (como si fuera a pasar la vuelta ciclista) para que no circulen los coches....pero sí los peatones....han hecho una zona peatonal...
Nos volvimos al hostal dando un paseo de cuidado y muy cansados. Estamos entrenando para lo que nos espera en los parques.
Mañana será otro día....
3/08/09
A las 7:00 otra vez el despertador de Tamara, pero esta vez con una canción más entretenida y menos estridente: Mary Poppins.
Después de desayunar el resto del yogurt de Kg que me habia comprado el dia anterior, nos fuímos Jorge,Fran,Cristian y yo a por los coches de alquiler que habíamos reservado desde España. Para variar y como era de esperar el último día en N.Y fue el día en que no nos perdimos en el metro y llegamos a la oficina de alquiler a la primerísima.
Nos esperábamos cualquier cosa y después de un rato esperando, cubriendo papeles, etc. La chica que nos atendía nos dice: Un Hyundai Accent......Un hyundai Accent ??? Que coche nos das ??? Le preguntamos y dijimos que teníamos pagados dos coches tipo berlina y que nos tenían que dar algo similar o de superior categoría. Su respuesta fue: Os ofrezco un coche más grande por 275$ más, ( no te fastidia, así hago yo negocio también ).
Bajamos al aparcamiento a ver que coche nos daban finalmente, si nos daban el Julay Accent y teníamos que gritarles o que. Apareció el tipo de la oficina de alquiler con un Chrysler bastante grande ( tipo PT Cruiser ) y el Julay Accent, pero con maletero.Menos mal que no nos dieron dos Hyunday porque no hubieran entrado todas las cosas que llevamos. Nos montamos, organizamos todo y pusimos rumbo a Philadelphia, con jorge y Fran como pilotos.
Jorge, Javi, Cristian y Angela en la gasolinera, llenándole el depósito a nuestro flamante Chrysler, esperemos que nos lleve sin problemas hasta San Francisco..
Después de unas 100 millas llegamos y aparcamos en un subterráneo que hay cerca de la zona antigua. El camino hasta ahí es la típica autopista americana de 3 o 4 carriles por sentido, aburrida al ir con un coche automático y con los enormes camiones adelantándote por la izquierda a todo trapo.
No se como será la zona moderna, pero la zona antigua quitando que es muy tranquila y relajada no tiene mucho interés aparte de unas zonas concretas. Tiene el interés porque es "la cuna de América" donde nació lo que conocemos hoy en día como Estados Unidos.
Justo enfrente de donde se encontraba la casa de George Washington, se encuentra el mueso donde está guardada la campana. Para entrar, la polica te registra toda la maleta,bolsa o cualquier cosa que uno lleve. Y una vez dentro, una serie de paneles van contando la historia de todo lo que sucedió durante la guerra de la independencia, la historia de la campana desde esa época hasta hoy. Al fondo de todo es donde se encuentra la protagonista del museo, y donde todo el mundo se agolpa para sacarse la foto con uno de los símbolos del país.
Justo enfrente de donde se encontraba la casa de George Washington, se encuentra el mueso donde está guardada la campana. Para entrar, la polica te registra toda la maleta,bolsa o cualquier cosa que uno lleve. Y una vez dentro, una serie de paneles van contando la historia de todo lo que sucedió durante la guerra de la independencia, la historia de la campana desde esa época hasta hoy. Al fondo de todo es donde se encuentra la protagonista del museo, y donde todo el mundo se agolpa para sacarse la foto con uno de los símbolos del país.
En el lugar donde estuvo la casa de George Washington, han puesto en el suelo unas maderas simulando las habitaciones y cuartos de la misma. Una tipo de altillo de madera muy bien adornado, permite ver el plano desde una pequeña altura superior.
Y esta es una de las campanas más famosas del mundo. En las fotos que se muestran con su historia se pueden ver a todo tipo de personajes del mundo, desde política, reyes, intelectuales, e incluso el Dalai Lama posando con ella.
Aparte de esto, un edificio anexo y el barrio de casas antguas que hay alrededor, la zona no tiene mucho más interés. Da la impresión de estar en un pueblo un poco grande, porque el tráfco no es muy excesivo, hay poco ruido y da la impresión de ser un lugar super tranquilo.
Salimos y tomamos direccion a Wasington, con alguna pequeña retención en el camino.A una velocidad de crucero de 55/60 millas, los coches te pasan a mucha más velocidad pero nosotros no nos la queremos jugar con una multa o con un policia aburrido. Al final llegamos a la capital del país sin nigún problema y dejamos las cosas en el hostal, que estaba muy bien.
Bajamos a cenar en un supermercado que tiene cominda preparada y unos asientos enfrente de las cajas para comer (estos americanos....) y luego nos dimos un paseo nocturno hasta la Casa Blanca, y el Obelisco, etc.
Vaya fracaso el Obelisco, todos pensando que era Egipcio y cuando llegamos por la noche, le notamos unas luces rojas en lo alto. Estábamos pensando: Pues ya les vale, ponerle unas luces a una cosa tan antigua, y resulta que es de ladrillo !!!! Eso sí, las banderitas rodeándolo le quedan muy bien.
La casa Blanca está como incrustada en un parque en medio de la ciudad y no se ve hasta que no se está casi delante.Por la parte trasera la policia tiene acordonada una zona con vayas y bloques de hormigón (como si fuera a pasar la vuelta ciclista) para que no circulen los coches....pero sí los peatones....han hecho una zona peatonal...
Nos volvimos al hostal dando un paseo de cuidado y muy cansados. Estamos entrenando para lo que nos espera en los parques.
Mañana será otro día....
Washington - Bedford
Día 6
4/8/09
Hoy por primera vez hemos dormido hasta más de las 7:00am. Como el plan era visitar Washington y tomar carretera hacia algún punto, pues no lo tomamos con más calma. A las 9:30 y con todo el calor del mundo, nos pusimos en marcha buscando alguna parada de metro cercana. Al llegar, comprobamos que este metro es infinitamente mejor que el de N.Y, sobre todo ( y la mayor diferencia entre ambos ) es que aquí se paga por viaje y destino, es decir, dependiendo de a donde se vaya, se paga más o menos.
Nos bajamos en la parada más próxima al Capitolio, y después de un paseo alrededor del edificio, hicimos cola para entrar dentro. Antes de poder traspasar sus puertas, uno se encuentra con un registro peor si cabe que el de los aeropuertos: nos hicieron tirar el agua, y hasta las botellas vacías, que con tanto cariño llevábamos rellenando desde N.Y.
Una vez dentro y antes de pasar a ver las dependencias, a los visitantes les muestran un vídeo ( muy patriótico ) sobre la historia del páis y como funciona su gobierno. Menos mal que era breve ( unos 15 minutos ) porque sino podríamos llegar a quedarnos dormidos allí....
Después del vídeo, nos prestaron unas audio-guías, y acompañados de una guía inglesa ( íbamos igual que los Chinos en Toledo ) no íba explicando cosas y nosotros la escuchábamos por los auriculares. Entramos en una sala a través de un pasillo interior, donde había una veintena de estatuas de antiguos presidentes y personas importantes del país. La cúpula de esa sala es increíble, está repleta de frescos, y alrededor tiene unas pinturas de una especie de indígenas, que desde la distancia daba la impresión de ser relieve.
El calor era agobiante, y gracias a los servicios de seguridad del Capitolio no teníamos ni una gota de agua que llevarnos a la boca.Cuando por fín llegamos a las proximidades del Obelisco, decidimos hacer un cambio de planes: Visitaríamos la Casa Blanca antes de ir a comer, y el monumento a Lincon y a la guerra de Vietnam se quedarían para la tarde, porque otros 2 km más al pleno Sol de las 14:00 eran suficientes para deshidratarnos casi con total seguridad.
Rodeamos la casa del presidente del país, y después buscamos un lugar donde beber, comer y estar frescos un rato. Encontramos un restaurante de comida rápida que preparaban unos bocadillos variados con bastante buena pinta y baratos. Aprovechamos de paso y le dejamos seca la máquina de refrescos. Ahí es dónde yo descubrí una gran bebida que por desgracia no existe en España: El Dr.Pepper ( bebida de Cola con ligero sabor a cereza ), es algo especial, porque no te deja indiferente: O la amas, o la odias ......De los ocho, tan sólo la amaba yo.....
Ante el calor que hacía, todo lo que nos quedaba por visitar y la hora que era, tomamos otra decisión trascendental : Si queríamos salir de Washington en el día, tendríamos que dejar de visitar cosas o sino hacerlo en coche, porque al ritmo que llevábamos no nos daría tiempo. Así que nos volvimos al hotel para recoger las cosas y de camino comprar unos walkie-talkies para ir comunicándonos entre los dos coches.
Aparcamos el coche en el aparcamiento del Cementerio de Washington ( si, del cementerio ) y atravesamos el puente hasta llegar al monumento a Lincon. Un edificio de mármol blanco, lleno de columnas y con una escultura del presidente más famoso de los EEUU en su interior. Como si estuviera contemplando todo, en línea recta se encuentra el Obelisco, y más lejos el Capitolio. Siguiendo nuestra ruta y recordatorio de escenarios con películas famosas, en las escalera del monumento a Lincon fue donde Tom Hanks da el discurso a los pacifistas en "Forrest Gump" y después se mete corriendo en el estanque para abrazarse con su querida Jenny. Las bromas y recreaciones fueron continuas claro está.
Con un poco de prisa visitamos parque próximo donde se encuentran los monumentos a los muertos en Vietnam y en la guerra de Corea. La mítica pared con todos los nombres grabados de los soldados caídos en los diversos actos bélicos es fundamental en cada zona, se respira un ambiente tenso y silencioso según uno se va aproximando a ella. Paseando entre figuras, paneles, banderas, etc uno se plantea que motivos tienen los americanos de meterse en todo cuanto conflicto armado hay en el mundo....Así les va......
Volvimos a los coches puntuales, porque en 10 minutos cerraban ya el cementerio y no me quiero ni imaginar que hubiera pasado, si nos dejan los coches dentro con todas nuestras cosas en los maleteros. Y nos pusimos en marcha camino de Chicago. Conducimos alrededor de 3 horas más o menos y cuando se empezó a hacer de noche, Jorge sacó su lista con nombres y direcciones de campings que había cercanos, para buscar uno donde parar y dormir.
Después de dar un par de vueltas medio perdidos, parar en una gasolinera que estaba cerrada, completamente a oscuras excepto su luz interior y asaltar a un buen hombre que iba en su camioneta; por fin encontramos el camping que estábamos buscando. Estaba cerrado, porque en este país todo cierra a las 21:00, pero en la puerta tenían unas indicaciones muy claras de como debíamos actuar: Escoger una parcela de la lista que habían dejado en la ventana, cubrir un papel, meterlo en un buzón y al día siguiente antes de marchar, ir a la oficina a pagar. Vaya confianza tienen en la gente...
Mientras unos iban "estudiando" como se montaban las tiendas ( porque las estábamos estrenando ), yo me dispuse como buen ciudadano honrado, a dejar todos mis datos en la hoja de recepción, sin saber que cuando volviera a las tiendas, la mente perversa de mis compañeros ya se había puesto a funcionar, sopesando la posibilidad de aprovecharse de tanta amabilidad y dejar el camping a primera hora del día siguiente sin pagar....
Baños, Duchas individuales,Wifi....en un recinto enorme..y por tan sólo 27$ por todo !!! Así cualquiera se va de camping de vacaciones todo el mes !!!.
4/8/09
Hoy por primera vez hemos dormido hasta más de las 7:00am. Como el plan era visitar Washington y tomar carretera hacia algún punto, pues no lo tomamos con más calma. A las 9:30 y con todo el calor del mundo, nos pusimos en marcha buscando alguna parada de metro cercana. Al llegar, comprobamos que este metro es infinitamente mejor que el de N.Y, sobre todo ( y la mayor diferencia entre ambos ) es que aquí se paga por viaje y destino, es decir, dependiendo de a donde se vaya, se paga más o menos.
Nos bajamos en la parada más próxima al Capitolio, y después de un paseo alrededor del edificio, hicimos cola para entrar dentro. Antes de poder traspasar sus puertas, uno se encuentra con un registro peor si cabe que el de los aeropuertos: nos hicieron tirar el agua, y hasta las botellas vacías, que con tanto cariño llevábamos rellenando desde N.Y.
La diferencia entre verlo en revistas, libros o incluso televisión con la realidad es grande. La verdad, es que es uno de esos lugares que impresiona cuando uno está delante.
Una vez dentro y antes de pasar a ver las dependencias, a los visitantes les muestran un vídeo ( muy patriótico ) sobre la historia del páis y como funciona su gobierno. Menos mal que era breve ( unos 15 minutos ) porque sino podríamos llegar a quedarnos dormidos allí....
Después del vídeo, nos prestaron unas audio-guías, y acompañados de una guía inglesa ( íbamos igual que los Chinos en Toledo ) no íba explicando cosas y nosotros la escuchábamos por los auriculares. Entramos en una sala a través de un pasillo interior, donde había una veintena de estatuas de antiguos presidentes y personas importantes del país. La cúpula de esa sala es increíble, está repleta de frescos, y alrededor tiene unas pinturas de una especie de indígenas, que desde la distancia daba la impresión de ser relieve.
El trabajo realizado en la cúpula es digno de alabar. Los detalles de las figuras inferiores es espectacular.
El siguiente paseo fue un pasillo bastante largo que no sabíamos muy bien a donde nos dirigía... ( Guantánamo ??? jeje ) , pero resulto ser el tunel que atraviesa la plaza y que va desde el Capitolio a la Biblioteca. Esta última, es un edificio de mármol totalmente tallado y con todos sus techos pintados con escenas y frescos. La biblioteca tiene una sala central digna de película de investigación, con todos los libros colocados en su sitio, en diversos estantes, niveles, alturas, así como mesas con lámparas, todo por supuesto enmoquetado...( como le gusta a los americanos la moqueta...). Para poder observar la biblioteca, la visita se hace desde una planta superior, con doble cristal blindado y terminantemente prohibído sacar fotografías. Algo prohibido para un español ?? Decir en mi defensa que esta vez no lo sabía, me enteré después...
Otra imagen de la biblioteca, en este caso de las ventanas de la parte superior y las vidrieras con los escudos y la madera tallada.
Al salir de ahí, y volver a la luz del día, atravesamos el enorme parque que va hasta el Obelisco desde el Capitolio. No sabemos cuál es la distancia concreta entre un punto y el otro, pero como poco 2 km en línea recta creemos que los hay. Estar ahí, y recordar el momento de la investidura de Obama como presidente del país, con toda esa distancia repleta de personas .....Cuanta gente podrá entrar en un recinto como ese de unos 2 km de largo por casi 100 metros de ancho ??? No se contar tanto...
No sé que tipo de personas tienen acceso a esta biblioteca, ni que tipo de ejemplares habrá en ella, pero seguramente el valor del recinto en general sea incalculable.
Otra imagen de la biblioteca, en este caso de las ventanas de la parte superior y las vidrieras con los escudos y la madera tallada.
Al salir de ahí, y volver a la luz del día, atravesamos el enorme parque que va hasta el Obelisco desde el Capitolio. No sabemos cuál es la distancia concreta entre un punto y el otro, pero como poco 2 km en línea recta creemos que los hay. Estar ahí, y recordar el momento de la investidura de Obama como presidente del país, con toda esa distancia repleta de personas .....Cuanta gente podrá entrar en un recinto como ese de unos 2 km de largo por casi 100 metros de ancho ??? No se contar tanto...
El calor era agobiante, y gracias a los servicios de seguridad del Capitolio no teníamos ni una gota de agua que llevarnos a la boca.Cuando por fín llegamos a las proximidades del Obelisco, decidimos hacer un cambio de planes: Visitaríamos la Casa Blanca antes de ir a comer, y el monumento a Lincon y a la guerra de Vietnam se quedarían para la tarde, porque otros 2 km más al pleno Sol de las 14:00 eran suficientes para deshidratarnos casi con total seguridad.
Cientos de personas se agolpan a la verja para sacarse una foto con la Casa Blanca al fondo. Mientras tanto varios vehículos de la policia vigilan la zona.
Rodeamos la casa del presidente del país, y después buscamos un lugar donde beber, comer y estar frescos un rato. Encontramos un restaurante de comida rápida que preparaban unos bocadillos variados con bastante buena pinta y baratos. Aprovechamos de paso y le dejamos seca la máquina de refrescos. Ahí es dónde yo descubrí una gran bebida que por desgracia no existe en España: El Dr.Pepper ( bebida de Cola con ligero sabor a cereza ), es algo especial, porque no te deja indiferente: O la amas, o la odias ......De los ocho, tan sólo la amaba yo.....
Ante el calor que hacía, todo lo que nos quedaba por visitar y la hora que era, tomamos otra decisión trascendental : Si queríamos salir de Washington en el día, tendríamos que dejar de visitar cosas o sino hacerlo en coche, porque al ritmo que llevábamos no nos daría tiempo. Así que nos volvimos al hotel para recoger las cosas y de camino comprar unos walkie-talkies para ir comunicándonos entre los dos coches.
Aparcamos el coche en el aparcamiento del Cementerio de Washington ( si, del cementerio ) y atravesamos el puente hasta llegar al monumento a Lincon. Un edificio de mármol blanco, lleno de columnas y con una escultura del presidente más famoso de los EEUU en su interior. Como si estuviera contemplando todo, en línea recta se encuentra el Obelisco, y más lejos el Capitolio. Siguiendo nuestra ruta y recordatorio de escenarios con películas famosas, en las escalera del monumento a Lincon fue donde Tom Hanks da el discurso a los pacifistas en "Forrest Gump" y después se mete corriendo en el estanque para abrazarse con su querida Jenny. Las bromas y recreaciones fueron continuas claro está.
Lincon observa todo desde su asiento en su monumento.
Foto con el Obelisco al fondo y más lejos aún el Capitolio. Esta zona la han hecho a lo grande, las distancias hay que medirlas en kilómetros.
Con un poco de prisa visitamos parque próximo donde se encuentran los monumentos a los muertos en Vietnam y en la guerra de Corea. La mítica pared con todos los nombres grabados de los soldados caídos en los diversos actos bélicos es fundamental en cada zona, se respira un ambiente tenso y silencioso según uno se va aproximando a ella. Paseando entre figuras, paneles, banderas, etc uno se plantea que motivos tienen los americanos de meterse en todo cuanto conflicto armado hay en el mundo....Así les va......
Uno de los muchos monumentos a las víctimas de los muchos conflictos bélicos, en este caso a los de la guerra de Corea en la época de 1950
Volvimos a los coches puntuales, porque en 10 minutos cerraban ya el cementerio y no me quiero ni imaginar que hubiera pasado, si nos dejan los coches dentro con todas nuestras cosas en los maleteros. Y nos pusimos en marcha camino de Chicago. Conducimos alrededor de 3 horas más o menos y cuando se empezó a hacer de noche, Jorge sacó su lista con nombres y direcciones de campings que había cercanos, para buscar uno donde parar y dormir.
Después de dar un par de vueltas medio perdidos, parar en una gasolinera que estaba cerrada, completamente a oscuras excepto su luz interior y asaltar a un buen hombre que iba en su camioneta; por fin encontramos el camping que estábamos buscando. Estaba cerrado, porque en este país todo cierra a las 21:00, pero en la puerta tenían unas indicaciones muy claras de como debíamos actuar: Escoger una parcela de la lista que habían dejado en la ventana, cubrir un papel, meterlo en un buzón y al día siguiente antes de marchar, ir a la oficina a pagar. Vaya confianza tienen en la gente...
Mientras unos iban "estudiando" como se montaban las tiendas ( porque las estábamos estrenando ), yo me dispuse como buen ciudadano honrado, a dejar todos mis datos en la hoja de recepción, sin saber que cuando volviera a las tiendas, la mente perversa de mis compañeros ya se había puesto a funcionar, sopesando la posibilidad de aprovecharse de tanta amabilidad y dejar el camping a primera hora del día siguiente sin pagar....
Baños, Duchas individuales,Wifi....en un recinto enorme..y por tan sólo 27$ por todo !!! Así cualquiera se va de camping de vacaciones todo el mes !!!.
Bedford - Chicago
Día 7
5/8/09
No hemos dormido tan mal para se la primera noche en la tienda de campaña. He compartido espacio con Javi, y se ha portado muy bien: no ha roncado, no me ha tocado, ni nada de nada jeje.
Ante la insistencia del grueso del grupo en marcharnos sin pagar, doy mi opinión y les expongo que mis datos están reflejados en la hoja de entrada, y que total por 27$ en total, tampoco compensa jugársela y probar a ver como se lo toman si se enteran. Así que nos metemos en la oficina, y le explicamos a la chica que allí estaba lo que nos pasó la noche anterior ( llegamos tarde, somos turistas, no sabemos inglés, bla,bla,bla) la mujer, puso cara como de no saber nada de nada, nos cobró los 27$ y nosotros nos fuímos mas contentos que poco.
Estamos adaptándonos poco a poco a la conducción en este país, y si conducir un coche automático no tiene ningún tipo de complicación, circular ya es otra cosa. Cualquier vehículo puede adelantar por la derecha o la izquierda indistintamente, por tanto hay que estar muy atento a por donde aparecen. Incluso en algunas ocasiones, uno se llega a ver en el medio de dos camiones enormes que adelantan por ambos lados. También nos tomamos bastante en serio las normas y límites de circulación ( por el momento ) nos han contado que soy bastante estrictos si te "cazan" excediéndote el límite, pero por lo que hemos visto hasta ahora, pocos somos los que lo respetamos.
Otra cosa agradable de ver y un tanto sorprendente, es la cantidad de moteros que nos adelantan; motos grandes, más pequeñas, con tres ruedas, y todos con su cazadora de cuero y sin casco !!! En este país tan sólo en algunos estados es obligatorio el uso del casco, así que todos van como les da la gana.
Llegamos a los alrededores de Chicago con la noche ya encima. Con Fran al volante y yo de copiloto con el mapa. La entrada no resultó tan sencilla como la de Washington, más que nada porque nuestro albergue estaba en el centro de la ciudad y el mapa que nosotros teníamos nombraba las calles de forma muy superficial, tanto que justo en la zona de Downtown no aparecían ni las calles ni los nombres. Al entrar en la ciudad por la interestatal, nos salimos hacia una vía de servicio por miedo a pasarnos la entrada y no poder dar vuelta después, la zona que atravesamos no nos ofrecía ninguna confianza: todo oscuro, muy sucio, con gente extraña, etc. Llegamos por fin al centro y tuvimos que preguntar varias veces como llegar hasta la calle donde se ubicaba el albergue. Como siempre, unos te indicaban a la derecha y otros a la izquierda o no sabían de que les estabas hablando, así que tardamos más de 1 hora y de casualidad en encontrar el sitio.
Nos organizamos para que mientras Jorge y el resto, hacían el check-in, Fran y yo buscábamos un sitio donde aparcar los coches hasta la mañana siguiente como poco. La sorpresa llegó cuando nos metimos de lleno en el caos de circulación que tiene esta ciudad. Mientras íbamos buscando un parking o similar, los semáforos y las señales de dirección obligatoria nos estaban dirigiendo hacia la salida del centro, y cada vez estábamos más perdidos. Yo iba conduciendo delante y Fran detrás, nos metimos en una calle que daba a la avenida principal, para volver a buscar la calle donde nos íbamos a hospedar. De repente, un hombre negro ( Somos los únicos blancos que están en Chicago a estas horas ) que iba conduciendo se pone enfrente de mí, y se echa las manos a la cabeza.....Estábamos en el carril contrario !!! Era una calle de dos direcciónes que nosotros habíamos hecho de una sola jajajaja.
Encontrar un sitio donde dejar el coche en Chicago por la noche no es ni fácil ni barato. Hay unas cuantas parcelas entre los edificios, rodeadas de valla de alambrada y con una caja, donde la gente aparca el coche durante el día y paga por horas. Por la noche estas parcelas están abiertas, y ningún osado se atreve a dejar el coche ahí, nosotros no íbamos a ser menos. Ante la situación desesperada, entramos en un parking ( de los de siempre ) a preguntar precios para dejar el coche hasta el día siguiente por la mañana ( unas 6 horas ), el precio nos abrió los ojos como platos: 40 dólares por coche !!!! . En la calle tampoco lo podíamos dejar, porque también tienen zona azul por las noches ... ( 3 dólares la hora ). Al final y después de dar muchas vueltas y tener un desencuentro con un indigente un poco pesado, los dejamos en un parking de esos de 35$ hasta las 8:00 am. Por cierto, en esos sitios te hacen bajarte del coche y ellos se encargan de aparcártelo y devolvértelo al día siguiente en la entrada, da igual tu nivel adquisitivo o modelo que coche conduzcas, aunque pensándolo bien, por esos precios es lo menos que deberían de hacer.
La primera toma de contacto peatonal con Chicago no nos ofreció mucha confianza la verdad. El pequeño paseo hasta el albergue ( un par de manzanas ) nos fue suficiente para observar como la primera impresión de la ciudad es algo más que mala: Indigentes por la calle, vagabundos, gente pidiendo dinero,etc.
Cuando llegamos al albergue, la cosa se seguía torciendo. Al parecer nos estaban cobrando más de lo que nos habían mandado por mail cuando Jorge efectuó la reserva, la cantidad no era gran cosa, pero si lo suficientemente importante como para llevarnos una sorpresa y descuadrarnos un poco las cuentas que llevábamos hasta el momento. Nos dieron una habitación para los ocho, que daba a una de las calles laterales del edificio. A la altura del cuarto piso ( casi a la par de nuestra ventana ) pasan las vías del tren urbano que recorre el centro haciendo un cuadrado entre varias manzanas, cada vez que pasa retiemblan las ventanas....
Salimos a cenar algo, pero a las horas que eran estaba todo cerrado, y los lugares que había para poder comer algo eran sumamente caros ( ya habíamos pagado bastante de alojamiento ), después de un buen rato dando vueltas y comprobando como la primera impresión de Chicago no era equivocada, encontramos un lugar llamado 7eleven ( parecido a un 24 horas ) donde pudimos comprar unos sandwiches precocinados y unas patatillas. Eso fue lo que cenamos antes de irnos de vuelta al albergue, y meternos en la cama para dejar atrás este día que terminó de forma infernal.
Chicago me recuerda a Baku ( Capital de Azerbaiján ), espero que la semejanza esté sólo en mi cabeza, porque sino ya nos podemos ir preparando.....
5/8/09
No hemos dormido tan mal para se la primera noche en la tienda de campaña. He compartido espacio con Javi, y se ha portado muy bien: no ha roncado, no me ha tocado, ni nada de nada jeje.
Ante la insistencia del grueso del grupo en marcharnos sin pagar, doy mi opinión y les expongo que mis datos están reflejados en la hoja de entrada, y que total por 27$ en total, tampoco compensa jugársela y probar a ver como se lo toman si se enteran. Así que nos metemos en la oficina, y le explicamos a la chica que allí estaba lo que nos pasó la noche anterior ( llegamos tarde, somos turistas, no sabemos inglés, bla,bla,bla) la mujer, puso cara como de no saber nada de nada, nos cobró los 27$ y nosotros nos fuímos mas contentos que poco.
Nuestro primer campamento. Un camping enorme con una lista de actividades enorme: mini-golf, wifi, caballos, muchas duchas, y sitio de sobra donde escoger para poner la tienda.
A medida que nos vamos adentrando más en el país, empezamos a sentirnos ya más partícipes de nuestro viaje. El paisaje es mas rural ya: muchísimos campos cultivados, algún monte, casas de madera unifamiliares,etc. Y la gente empieza a ser ya como lo que vemos desde Europa : Esos hombres de 40/50 años, con su camisa de cuadros, conduciendo su camioneta con el perro en la parte trasera, etc. También me llama mucho la atención el tráfico que hay por las carreteras Interestatales ( el semejante a las autovías europeas ), la gran cantidad de camiones enormes, todos pintados de colores y con remolques a los que no se le ve el final.
Aparte de todos los camiones que nos cruzamos, el país está repleto de autocaravanas, como en el caso de las motos, de todos los tipos y colores. Otra forma de hacer turismo....
Estamos adaptándonos poco a poco a la conducción en este país, y si conducir un coche automático no tiene ningún tipo de complicación, circular ya es otra cosa. Cualquier vehículo puede adelantar por la derecha o la izquierda indistintamente, por tanto hay que estar muy atento a por donde aparecen. Incluso en algunas ocasiones, uno se llega a ver en el medio de dos camiones enormes que adelantan por ambos lados. También nos tomamos bastante en serio las normas y límites de circulación ( por el momento ) nos han contado que soy bastante estrictos si te "cazan" excediéndote el límite, pero por lo que hemos visto hasta ahora, pocos somos los que lo respetamos.
En uno de los pueblos donde nos paramos a preguntar, nos encontramos esta camioneta preparada para la temporada de invierno. Si en Agosto a primera hora hacía frío, seguramente se pasen las navidades bajo cero...
Otra cosa agradable de ver y un tanto sorprendente, es la cantidad de moteros que nos adelantan; motos grandes, más pequeñas, con tres ruedas, y todos con su cazadora de cuero y sin casco !!! En este país tan sólo en algunos estados es obligatorio el uso del casco, así que todos van como les da la gana.
Una de las motos mas espectáculares que he visto hasta el momento, con remolque y nevera, sobran las palabras...
Nos paramos a comer en un área de servicio más grande que muchos centros comerciales en España, tenía sitio para aparcar coches y camiones hasta aburrir, y dentro un McDonald´s, Pizza Hut, Starbucks,etc,etc. Como llevábamos unas ensaladas compradas en la gasolinera donde desayunamos, las degustamos en la entrada como si fuéramos "homeless". La gente entrando a comer dentro y nosotros en el suelo sentados y con el cacharro de plástico en la mano. Como curiosidad, dentro del edificio y justo enfrente de los baños, tienen una televisión bastante grande ( sobre 40" ) con toda la información, noticias y condiciones de la carretera desde ese punto km hasta la siguiente área de servicio: Tráfico, Accidentes, Entradas y Salidas a los pueblos de alrededor, etc,etc,etc.
El resto del día no tuvo mucho más de interesante, salvo la banda sonora que Fran nos quiso imponer en el coche: Los grandes éxitos de Camela....por suerte se olvidó el cargador del mp3 en casa, así que sólo sufriríamos el castigo hasta que se le acabara la batería. La tarde se hizo amena, porque hemos decidido para cada 2 horas aproximadamente para descansar, estirar las piernas, cambiar de conductor y también que los fumadores compulsivos ( como Javi y Cristian ) sacien su vicio. Ese es el trato: nosotros paramos cada un par de horas, más o menos y ellos no fuman dentro del coche.
El único lugar con sombra en todo el área de servicio era la entrada al edificio, donde estaban todos los restaurantes y tiendas. Eso no nos impidió sentarnos en el suelo para comer sin ningún tipo de complejo.
El resto del día no tuvo mucho más de interesante, salvo la banda sonora que Fran nos quiso imponer en el coche: Los grandes éxitos de Camela....por suerte se olvidó el cargador del mp3 en casa, así que sólo sufriríamos el castigo hasta que se le acabara la batería. La tarde se hizo amena, porque hemos decidido para cada 2 horas aproximadamente para descansar, estirar las piernas, cambiar de conductor y también que los fumadores compulsivos ( como Javi y Cristian ) sacien su vicio. Ese es el trato: nosotros paramos cada un par de horas, más o menos y ellos no fuman dentro del coche.
Llegamos a los alrededores de Chicago con la noche ya encima. Con Fran al volante y yo de copiloto con el mapa. La entrada no resultó tan sencilla como la de Washington, más que nada porque nuestro albergue estaba en el centro de la ciudad y el mapa que nosotros teníamos nombraba las calles de forma muy superficial, tanto que justo en la zona de Downtown no aparecían ni las calles ni los nombres. Al entrar en la ciudad por la interestatal, nos salimos hacia una vía de servicio por miedo a pasarnos la entrada y no poder dar vuelta después, la zona que atravesamos no nos ofrecía ninguna confianza: todo oscuro, muy sucio, con gente extraña, etc. Llegamos por fin al centro y tuvimos que preguntar varias veces como llegar hasta la calle donde se ubicaba el albergue. Como siempre, unos te indicaban a la derecha y otros a la izquierda o no sabían de que les estabas hablando, así que tardamos más de 1 hora y de casualidad en encontrar el sitio.
Entrada nocturna a Chicago, con un peaje para cruzar el puente. Una de las fotos que más me gustan de todo el viaje.
Nos organizamos para que mientras Jorge y el resto, hacían el check-in, Fran y yo buscábamos un sitio donde aparcar los coches hasta la mañana siguiente como poco. La sorpresa llegó cuando nos metimos de lleno en el caos de circulación que tiene esta ciudad. Mientras íbamos buscando un parking o similar, los semáforos y las señales de dirección obligatoria nos estaban dirigiendo hacia la salida del centro, y cada vez estábamos más perdidos. Yo iba conduciendo delante y Fran detrás, nos metimos en una calle que daba a la avenida principal, para volver a buscar la calle donde nos íbamos a hospedar. De repente, un hombre negro ( Somos los únicos blancos que están en Chicago a estas horas ) que iba conduciendo se pone enfrente de mí, y se echa las manos a la cabeza.....Estábamos en el carril contrario !!! Era una calle de dos direcciónes que nosotros habíamos hecho de una sola jajajaja.
Encontrar un sitio donde dejar el coche en Chicago por la noche no es ni fácil ni barato. Hay unas cuantas parcelas entre los edificios, rodeadas de valla de alambrada y con una caja, donde la gente aparca el coche durante el día y paga por horas. Por la noche estas parcelas están abiertas, y ningún osado se atreve a dejar el coche ahí, nosotros no íbamos a ser menos. Ante la situación desesperada, entramos en un parking ( de los de siempre ) a preguntar precios para dejar el coche hasta el día siguiente por la mañana ( unas 6 horas ), el precio nos abrió los ojos como platos: 40 dólares por coche !!!! . En la calle tampoco lo podíamos dejar, porque también tienen zona azul por las noches ... ( 3 dólares la hora ). Al final y después de dar muchas vueltas y tener un desencuentro con un indigente un poco pesado, los dejamos en un parking de esos de 35$ hasta las 8:00 am. Por cierto, en esos sitios te hacen bajarte del coche y ellos se encargan de aparcártelo y devolvértelo al día siguiente en la entrada, da igual tu nivel adquisitivo o modelo que coche conduzcas, aunque pensándolo bien, por esos precios es lo menos que deberían de hacer.
La primera toma de contacto peatonal con Chicago no nos ofreció mucha confianza la verdad. El pequeño paseo hasta el albergue ( un par de manzanas ) nos fue suficiente para observar como la primera impresión de la ciudad es algo más que mala: Indigentes por la calle, vagabundos, gente pidiendo dinero,etc.
Cuando llegamos al albergue, la cosa se seguía torciendo. Al parecer nos estaban cobrando más de lo que nos habían mandado por mail cuando Jorge efectuó la reserva, la cantidad no era gran cosa, pero si lo suficientemente importante como para llevarnos una sorpresa y descuadrarnos un poco las cuentas que llevábamos hasta el momento. Nos dieron una habitación para los ocho, que daba a una de las calles laterales del edificio. A la altura del cuarto piso ( casi a la par de nuestra ventana ) pasan las vías del tren urbano que recorre el centro haciendo un cuadrado entre varias manzanas, cada vez que pasa retiemblan las ventanas....
Salimos a cenar algo, pero a las horas que eran estaba todo cerrado, y los lugares que había para poder comer algo eran sumamente caros ( ya habíamos pagado bastante de alojamiento ), después de un buen rato dando vueltas y comprobando como la primera impresión de Chicago no era equivocada, encontramos un lugar llamado 7eleven ( parecido a un 24 horas ) donde pudimos comprar unos sandwiches precocinados y unas patatillas. Eso fue lo que cenamos antes de irnos de vuelta al albergue, y meternos en la cama para dejar atrás este día que terminó de forma infernal.
Chicago me recuerda a Baku ( Capital de Azerbaiján ), espero que la semejanza esté sólo en mi cabeza, porque sino ya nos podemos ir preparando.....
viernes, 25 de diciembre de 2009
Chicago - Chicago
Día 8
6/8/09
Un poco de miedo ofrece Chicago cuando uno se despierta recordando la experiencia de la llegada y cuando durante toda la noche no se dejan de oir ambulancias y el metro, dando la impresión de que todo pasa justo por el medio de la habitación.
En Chicago la hora cambia otra vez ( ya son 7 con respecto a España ). Cambia para todos menos para Tamara, así que como es la encargada de poner el despertador, todos estábamos despiertos 1 hora antes......
Salimos a la calle detrás de Tamara ( nuestra guía para esta ciudad ) y nuestro primer objetivo fueron las Seas Towers. De camino, Fran y yo cambiamos los coches de aparacamiento, para no tener que pagar todo nuestro presupuesto del mes en una noche.... y les salimos después al encuentro. Los pobres estaban buscando las torres y se sentaron a esperarnos en la entrada de un edificio, que casualidad que estaban en el lugar adecuado, les habían cambiado el nombre hacía 2 semanas !!!.
Nos pegamos el paseo del día buscando la catedral. La chica del Hostel International orientó a Tamara y a Fran, les dijo que estaba cerca y que el planetario abría a las 18:00. Al final la catedral estaba a unas 8 manzanas !!! y cuando llegamos estaba cerrada por obras.
Chicago cambia de día, y mucho. Parece ya una ciudad normal, con sus rascacielos, taxis, el metro que atraviesa el centro a 3 metros de alto, etc...y sobre todo tiene esa brisa que sienta tan bien.
El metro ligero de Chicago circula sólo en el centro de la ciudad y para no interferir en el tráfico urbano, han elevado las vías unos metros. El problema viene cuando por la noche el metro pasa a escasos 2 metros de la ventana, y no es especialmente silencioso.....
Visitamos el edificio más alto de Chicago y la torre del agua,uno de los pocos edificios que se salvó del incendio que arrasó la ciudad a principios de 1900. Aprovechando el buen día, nos dejamos caer por el Millenium Park ( lo mejor de la ciudad sin duda ). Pegado a la zona de rascacielos, se encuentra un parque donde la gente se mezcla con el agua, la música, los espectáculos...casi en el centro del recinto está la gran gota de agua cromada, donde se refleja todo lo que se ponga a su lado ( personas, edificios, etc).
Dentro de ese pequeño "mini-mundo" que está formado en el parque, hay pequeños conciertos y espectáculos para todos los gustos e incluso el gran escenario / teatro al aire libre con una cúpula metálica, donde la gente se tumba en la hierba a escuchar jazz. La sensación de relajación que ofrece el jazz unido al Sol y a la brisa que proviene desde el lago Michigan, hacen que esa media hora haya sido lo mejor de Chicago con diferencia.
Volvimos a la realidad para regresar de nuevo al Hostel para comer por alli cerca y nos separamos en grupos: unos se fueron a dormir y otros a dar una vuelta y comprar. Quedamos de encontrarnos a las 17:30 en la fuente del parque. Una especie de plato de ducha gigante, con dos paredes a los lados desde donde cae agua mientras se proyectan imágenes. Compramos los regalos de Ana y de Angela que estan de cumpleaños esta semana, y cuando llegamos a la plaza, Javi ya estaba empapado por meterse en la fuente con los niños je, je.
Aprovechando la ocasión, visitamos el museo de arte de Chicago, que está en un extremo del parque ( todo lo interesante está muy cerca ) no todos los días se pueden ver cuadros de El Greco, Goya, Miró, Van Gogh, etc. El único problema es que sólo teníamos 1 hora y media porque habíamos quedado con Javi en el puerta para ir después al planetario, que abría a las 18:00...
Paseando por la bahía de Chicago ( algo más de media hora larga ) pasamos por delante de la famosa fuente de Buckingham hasta llegar a la otra punta del puerto, desde donde las vistas del skyline de Chicago son fabulosas. Cuando llegamos al planetario, y al ver a tan poca gente por allí, le preguntamos al guardia de seguridad y su respuesta nos dió una de las frases del día y de todo el viaje : El planetario abre a las 9:00 y cierra a las 18:00 ( ya te vale Tamara ......jajaja) La chica del Hostel que le explicó a Tamara y Fran se lo dijo todo al revés...y nosotros la tomamos con ella...pobre mujer y aún no había terminado el día...
Ya que nos habíamos pegado el paseo, nos quedamos a ver la puesta de Sol desde la otra parte de la bahía. Para terminar el día, optamos por visitar la otra parte del puerto con la Noria y la zona de ocio. Decidimos montarnos en el autobús para cubrir el trayecto entre ambos sitios, y ahí fue donde por fin conocimos el verdadero sentido de la ciudad de Chicago: Por las noches se trasforma y todo lo peor sale a la oscuridad....
El autobusero nos tenía que cobrar 18$ por los viajes de todos, pero nos decía que metiéramos 20 en la máquina para pagar. Cuando metemos el billete en la máquina nos dice : "Lo siento, no devuelve cambio ", será cabrón !!!. Mientras Jorge le decía que así no se hacían las cosas, Tamara sacaba su lado más bestia y le gritaba de todo al conductor. Al final y después de mucho pelear, nos dió los 2$ que nos debía y nos regaló los transfers para poder montar en otro autobús sin coste mayor. Pero la cosa no se quedó ahí, en el momento de darnos los transfers, sólo nos daba 7, y le decía a Jorge: Toma 7, dale los 2$ a tu hermana y que se baje ...jajajaj.
Hemos llegado a la conclusión de que esta ciudad es digna de estudio, por el día una ciudad normal, por la noche...salen todos los zombies ......
Después de la historia con el autobusero y la breve visita al puerto y la Noria ( estaba cerrando cuando llegamos, por variar... ) nos volvimos al Hostel a hacer las maletas.
Nos quedan prácticamente 2 días de carretera por delante...
6/8/09
Un poco de miedo ofrece Chicago cuando uno se despierta recordando la experiencia de la llegada y cuando durante toda la noche no se dejan de oir ambulancias y el metro, dando la impresión de que todo pasa justo por el medio de la habitación.
En Chicago la hora cambia otra vez ( ya son 7 con respecto a España ). Cambia para todos menos para Tamara, así que como es la encargada de poner el despertador, todos estábamos despiertos 1 hora antes......
Foto de nuestra habitación del Hostel a primera hora de la mañana. Cristian y Jorge (al fondo) en medio de toda la ropa colganda después de hacer la colada.
Salimos a la calle detrás de Tamara ( nuestra guía para esta ciudad ) y nuestro primer objetivo fueron las Seas Towers. De camino, Fran y yo cambiamos los coches de aparacamiento, para no tener que pagar todo nuestro presupuesto del mes en una noche.... y les salimos después al encuentro. Los pobres estaban buscando las torres y se sentaron a esperarnos en la entrada de un edificio, que casualidad que estaban en el lugar adecuado, les habían cambiado el nombre hacía 2 semanas !!!.
Después de las Seas Towers, nos montamos en un pequeño barco que nos llevó por el río hasta otra parte de la ciudad. No era una góndola veneciana, pero permite ver Chicago desde otro punto de vista....
Nos pegamos el paseo del día buscando la catedral. La chica del Hostel International orientó a Tamara y a Fran, les dijo que estaba cerca y que el planetario abría a las 18:00. Al final la catedral estaba a unas 8 manzanas !!! y cuando llegamos estaba cerrada por obras.
Chicago cambia de día, y mucho. Parece ya una ciudad normal, con sus rascacielos, taxis, el metro que atraviesa el centro a 3 metros de alto, etc...y sobre todo tiene esa brisa que sienta tan bien.
Aquí una foto de los 7 Riojanos con la escultura a los emigrantes. A toda esa gente del campo que se mudó a la ciudad en busca de una vida mejor, la ciudad les ha hecho un homenaje.
El metro ligero de Chicago circula sólo en el centro de la ciudad y para no interferir en el tráfico urbano, han elevado las vías unos metros. El problema viene cuando por la noche el metro pasa a escasos 2 metros de la ventana, y no es especialmente silencioso.....
Visitamos el edificio más alto de Chicago y la torre del agua,uno de los pocos edificios que se salvó del incendio que arrasó la ciudad a principios de 1900. Aprovechando el buen día, nos dejamos caer por el Millenium Park ( lo mejor de la ciudad sin duda ). Pegado a la zona de rascacielos, se encuentra un parque donde la gente se mezcla con el agua, la música, los espectáculos...casi en el centro del recinto está la gran gota de agua cromada, donde se refleja todo lo que se ponga a su lado ( personas, edificios, etc).
Su verdadero nombre es : Chicago´s Bean, lo que viene siendo, la alubia o abichuela de Chicago. Y es uno de las esculturas, adornos, etc más originales que he visto nunca. Por no decir, lo bonito que es ponerse delante y ver el reflejo de todo lo que lo rodea.
Dentro de ese pequeño "mini-mundo" que está formado en el parque, hay pequeños conciertos y espectáculos para todos los gustos e incluso el gran escenario / teatro al aire libre con una cúpula metálica, donde la gente se tumba en la hierba a escuchar jazz. La sensación de relajación que ofrece el jazz unido al Sol y a la brisa que proviene desde el lago Michigan, hacen que esa media hora haya sido lo mejor de Chicago con diferencia.La ciudad de Chicago cambió una antigua estación de tren y una zona portuaria por el mayor parque de la ciudad, el resultado no les ha podido salir mejor. Es un lugar donde hay actuaciones, música y actividades todo el año.
Volvimos a la realidad para regresar de nuevo al Hostel para comer por alli cerca y nos separamos en grupos: unos se fueron a dormir y otros a dar una vuelta y comprar. Quedamos de encontrarnos a las 17:30 en la fuente del parque. Una especie de plato de ducha gigante, con dos paredes a los lados desde donde cae agua mientras se proyectan imágenes. Compramos los regalos de Ana y de Angela que estan de cumpleaños esta semana, y cuando llegamos a la plaza, Javi ya estaba empapado por meterse en la fuente con los niños je, je.
No sólo los niños disfrutaban del agua y los chorros, también se podían ver a sus padres con el bañador aprovechando para mojarse un poco.
Aprovechando la ocasión, visitamos el museo de arte de Chicago, que está en un extremo del parque ( todo lo interesante está muy cerca ) no todos los días se pueden ver cuadros de El Greco, Goya, Miró, Van Gogh, etc. El único problema es que sólo teníamos 1 hora y media porque habíamos quedado con Javi en el puerta para ir después al planetario, que abría a las 18:00...
Paseando por la bahía de Chicago ( algo más de media hora larga ) pasamos por delante de la famosa fuente de Buckingham hasta llegar a la otra punta del puerto, desde donde las vistas del skyline de Chicago son fabulosas. Cuando llegamos al planetario, y al ver a tan poca gente por allí, le preguntamos al guardia de seguridad y su respuesta nos dió una de las frases del día y de todo el viaje : El planetario abre a las 9:00 y cierra a las 18:00 ( ya te vale Tamara ......jajaja) La chica del Hostel que le explicó a Tamara y Fran se lo dijo todo al revés...y nosotros la tomamos con ella...pobre mujer y aún no había terminado el día...
Ya que nos habíamos pegado el paseo, nos quedamos a ver la puesta de Sol desde la otra parte de la bahía. Para terminar el día, optamos por visitar la otra parte del puerto con la Noria y la zona de ocio. Decidimos montarnos en el autobús para cubrir el trayecto entre ambos sitios, y ahí fue donde por fin conocimos el verdadero sentido de la ciudad de Chicago: Por las noches se trasforma y todo lo peor sale a la oscuridad....
Vista de los rascacielos de Chicago desde el paseo al planetario, con el lago Michigan en el medio.
El autobusero nos tenía que cobrar 18$ por los viajes de todos, pero nos decía que metiéramos 20 en la máquina para pagar. Cuando metemos el billete en la máquina nos dice : "Lo siento, no devuelve cambio ", será cabrón !!!. Mientras Jorge le decía que así no se hacían las cosas, Tamara sacaba su lado más bestia y le gritaba de todo al conductor. Al final y después de mucho pelear, nos dió los 2$ que nos debía y nos regaló los transfers para poder montar en otro autobús sin coste mayor. Pero la cosa no se quedó ahí, en el momento de darnos los transfers, sólo nos daba 7, y le decía a Jorge: Toma 7, dale los 2$ a tu hermana y que se baje ...jajajaj.
Hemos llegado a la conclusión de que esta ciudad es digna de estudio, por el día una ciudad normal, por la noche...salen todos los zombies ......
Después de la historia con el autobusero y la breve visita al puerto y la Noria ( estaba cerrando cuando llegamos, por variar... ) nos volvimos al Hostel a hacer las maletas.
Nos quedan prácticamente 2 días de carretera por delante...
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